Las personas con depresión tienen sentimientos de tristeza, se encuentran abatidos y no tienen ganas ni fuerzas de realizar ninguna actividad. El mero hecho de ir a trabajar, puede suponer para estas personas, una actividad imposible de llevar a cabo. Así se tramita una baja por depresión.
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1. Cómo solicitar una baja por depresión
La depresión es una enfermedad que cada vez se diagnostica con más frecuencia entre los trabajadores, y se calcula que en nuestro país la padecen entre tres y seis millones de españoles.
A la hora de solicitar un baja por depresión, hay que tener en cuenta la causa que la origina, es decir, que no será lo mismo que sea por motivos personales o si proviene del entorno laboral.
Depresión por motivos personales
En el caso de que el trabajador se encuentre deprimido por motivos personales, se considera un enfermedad común a efectos de baja laboral y por tanto se va a tramitar como una incapacidad temporal por contingencias comunes.
El trabajador que sienta que padece los síntomas de una depresión tiene que ir a su médico de cabecera, pues será el profesional competente para determinar que efectivamente se encuentra en esta situación y firme la baja médica.
Con la baja que firma el médico, la persona ya se encuentra incapacitada para ir a trabajar.
Depresión por motivos laborales
Puede ocurrir que el trabajador se encuentre deprimido por razones de su empleo, es decir, que pueden tener su origen en situaciones como:
- Desmotivación
- Estrés laboral
- Sobrecarga de trabajo
- Falta de reconocimiento
- Rivalidades entre compañeros
- Creencia en el despido
- Insatisfacción por las tareas que realiza
- Rutina laboral
- Mobbing o acoso
En los casos de depresión por trabajo, el procedimiento no debería ser el mismo:
Cuando esto ocurre, la baja médica debería prescribirla la mutua en primer lugar, es decir que no tendríamos que acudir de primeras a nuestro médico de cabecera, sino a la mutualidad de la empresa, puesto que estaríamos hablando de un accidente laboral y no de una enfermedad común.
Lo cierto es que, con toda probabilidad, la mutuas no conceden este tipo de bajas y por eso, el trabajador tendrá que acudir después a la Seguridad Social.
A partir de ahí, tendría dos opciones:
- Emprender la vía judicial para que se le reconozca como «accidente laboral» con todos los informes emitidos por el médico de la Seguridad Social.
- Gestionar la baja como una enfermedad común directamente.
2. ¿Cuánto puede durar esta baja médica?
Las depresiones son enfermedades que tienen una curación bastante lenta, y las personas que lo padecen suelen estar de baja un tiempo considerable.
Esto es así porque las enfermedades mentales son de por sí más complicadas que cualquier otra patología y por eso la recuperación es más lenta.
Ahora bien, una incapacidad temporal, ya sea por depresión o por cualquier otra causa, tendrá una duración máxima de doce meses.
Cuando se alcanzan los doce meses, el médico tiene la facultad de prorrogar la baja 180 días más si cree que el trabajador puede curarse en ese intervalo de tiempo.
Después de 18 meses de baja médica, hay que acudir al tribunal médico para valorar la incapacidad permanente
Si esto no ocurre y se alcanzan finalmente los 18 meses, hay que someterse a un tribunal médico que valore la concesión de una incapacidad permanente.
3. ¿Cuánto se cobra?
En cuanto a las cuantías que se perciben en estos casos, son las mismas que para otra enfermedad, es decir, que su salario no se reduce.
Lo que ocurre es que al estar de baja por incapacidad temporal, el trabajador cobra una prestación a través de la Seguridad Social o de la mutua.
Por tanto, el importe a percibir será el siguiente:
- Los tres primeros días de la baja médica: El trabajador no cobra nada
- Del cuarto al decimoquinto: el 60% de la base de cotización que tenga en el mes anterior
- Después del día 16: el 75% de la base de cotización
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Días de baja |
Importes por incapacidad temporal |
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1º al 3º |
No se cobra |
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4º al 15º |
60% de la base de cotización |
| A partir del 16º |
75% de la base de cotización |
Los convenios colectivos pueden contar con complementos de mejora en estos casos, y es posible que las cantidades a percibir sean mayores.
4. ¿Se puede viajar estando de baja por depresión?
Otra de las dudas que suelen hacerse quienes se encuentran en esta situación, es si pueden viajar en esas circunstancias y lo cierto es que no hay ninguna ley que se lo impida.
El trabajador puede desplazarse siempre que no ponga en riesgo su recuperación.
Ahora bien, siempre debe tener en cuenta que cuando una persona está de baja, existen controles y seguimientos semanales.
Además el INSS y la mutua puede requerirle para realizar revisiones médicas.
Por lo tanto, viajar y desplazarse es posible, pero hay que tener en cuenta que estos desplazamientos no pueden perjudicar la recuperación ni tampoco deben impedir que se acuda a las citas semanales para recoger partes o una revisión médica.