Saltar al contenido

La Ley de Dependencia

la ley de dependencia

Existen determinadas situaciones en las que una persona, por razón de su edad, de una enfermedad o discapacidad, así como por otras causas, no puede valerse plenamente por sí misma. En este caso, decimos que esa persona se encuentra en situación de dependencia. La Ley de Dependencia nació con el fin de prestar ayuda a las personas que se encuentran en esta situación.

dependencia
Formulario de reconocimiento de la situación de dependencia y el derecho a prestaciones de la Junta de Andalucía.

1. La situación de dependencia

Se considera que una persona está en situación de dependencia cuando necesita de otra persona para llevar a cabo las actividades del día a día, como pueden ser las relacionadas con sus cuidados personales, actividades del hogar, las relacionadas con su movilidad, así como cualquier otra que afecte a su independencia personal.

Existen diversas causas que pueden dar lugar a una situación de dependencia, bien puede ser por edad, enfermedad, discapacidad, etc, aunque hay que puntualizar que éstas deben tener carácter permanente.

Además, no se considerará necesariamente que una persona se halla en situación de dependencia  si se encuentra en alguna de las siguientes supuestos:

  • Que haya sido operada y necesite de la ayuda de otra persona para su recuperación.
  • Que sea una persona con una minusvalía reconocida.
  • Que sea una persona que tenga reconocida la invalidez laboral.
  • Que necesite estar inmovilizada durante un tiempo por una lesión sufrida.
  • Que por razón de su avanzada edad, necesite ayuda de otras personas en algunos momentos.

La situación de dependencia es regulada en España a través de la Ley 39/2006 de Promoción de la Autonomía Personal y Atención a las personas en situación de dependencia.

2. Qué derechos otorga la Ley de Dependencia

La Ley otorga los siguientes derechos a la persona que se encuentra en situación de dependencia:

A acceder a todas las ayudas a las que tiene derecho por la propia Ley.
A disfrutar de los derechos humanos y libertados fundamentales, y a que se respete su dignidad y su intimidad.
A que se le dé información completa y continuada acerca de su situación de dependencia, de manera comprensible y accesible.
A que, en el caso de que los procedimientos que se le apliquen sean utilizados para un proyecto docente o de investigación, se le advierta de esto, ya que tendrá que permitirlo previamente.
 A que se respete la confidencialidad de sus datos, de acuerdo con la Ley de Protección de Datos.
A participar cuando se formulen y apliquen las políticas que afecten a su propio bienestar, de manera individual o por medio de una asociación.
Si tiene capacidad de obrar suficiente para ello, a decidir sobre la tutela de sus bienes y de sí mismo, por si se diera el caso de que perdiera su capacidad de autogobierno.
A decidir con total libertad si quiere ingresar en un centro residencial.
A ejercer plenamente sus derechos judiciales si se le internara en contra de su voluntad, garantizándosele un proceso en el que se pueda defender.
A ejercer plenamente los derechos relacionados con su patrimonio.
A comenzar las acciones administrativas y judiciales necesarias para defender su derecho a acceder a las prestaciones y servicios que le conceda la Ley. Si se trata de menores o incapacitados judicialmente, actuarán en su nombre quienes tengan la patria potestad o representación legal.
A la igualdad de oportunidades, a no ser discriminados y a la accesibilidad de manera general, en cualquiera de los ámbitos de la Ley.
A no ser discriminado por su orientación o identidad sexual.

3. Obligaciones de quien está en situación de dependencia

Las personas que se encuentran en situación de dependencia tienen la obligación de porporcionar toda la información y datos que se le solicite desde la Administración para valorar su grado de dependencia, así como comunicar cualquier tipo de ayudas personalizadas que estén recibiendo.

Además, la ayuda económica que estén recibiendo tendrán que destinarla para los fines previstos.

4. Grados

La Ley reconoce los siguientes grados de dependencia:

A. Grado I

El grado I corrresponde con la dependencia moderada, es decir, cuando la persona necesite ayuda para llevar a cabo algunas actividades básicas del día a día, al menos una vez en el día, o tiene necesidades de ayuda intermitente o limitada para su independencia personal

B. Grado II

En este caso la dependencia es severa y tiene lugar cuando la persona necesita ayuda para llevar adelante las actividades diarias dos o tres veces a lo largo del día, pero no necesita un cuidador permanente. También se considera el grado II cuando tiene necesidades de apoyo extenso para su independencia personal.

C. Grado III

Cuando una persona se encuentra en grado III, se considera con gran dependencia. En este caso necesita ayuda para realizar las actividades del día a día varias veces al día y necesita la ayuda permanente de otra persona o apoyo generalizado para su independencia personal, por haber perdido su independencia física, mental, etc.

5. Requisitos para la situación de dependencia

La Ley de Dependencia establece los siguientes requisitos para acceder a los derechos que reconoce:

  • Encontrarse en uno de los grados de dependencia que la propia Ley establece y que hemos desarrollado en el párrafo anterior.
  • Residir en territorio español y haberlo hecho durante 5 años, 2 de ellos justo antes de presentar la solicitud. Si se trata de menores de 5 años, este requisito se exige a quien tenga su guarda y custodia.

6. Prestaciones

Las prestaciones a las que puede acceder la persona que se encuentre en situación de dependencia son las siguientes:

  1. Servicios prestados mediante la Red de Servicios Sociales de las Comunidades Autónomas, a través de centros y servicios públicos o concertados.
  2. Si lo anterior no es posible, recibir una ayuda económica periódica, cuyo fin es adquirir algún servicio necesario para las necesidades de la situación de dependencia.
  3. Excepcionalmente, una ayuda económica para recibir la atención de cuidadores no profesionales, como sus familiares.

La red de servicios se gestiona desde las comunidades autónomas y tienen competencia para establecer la normativa en cuanto a su funcionamiento.

Catálogo de servicios

En cuanto al catálogo de servicios, se contemplan los siguientes:

  • Servicios para la prevención de las situaciones que dan lugar a la dependencia y aquellos que ayudan a la autonomía de la persona.
  • Servicio de teleasistencia.
  • Ayuda en el domicilio, como puede ser atender las necesidades del hogar y los cuidados personales del dependiente.
  • Centro de día y noche. Dirigido a dependientes mayores y menores de 65 años. Estos centros cuentan también con atención especializada.
  • Atención residencial. En este caso, se ofrecen servicios de residencia y centros de atención a personas dependientes según el grado de discapacidad que tengan.

Para solicitar cualquiera de las ayudas contempladas en este apartado, los interesados deberán dirigirse al departamento de Bienestar Social de su comunidad con la finalidad de que puedan evaluar su caso y tramiten los servicios y ayudas que la persona necesita.

7. Personas en situación de dependencia en España

Un informe presentado en febrero de 2015 daba a conocer que en España había en ese momento 1.216.341 personas a las que se les había reconocido la situación de dependencia, las cuales representan un 2,6% de la población total, y que el 40% de estas personas, aproximadamente 500.000, no recibe ayuda ninguna por este motivo.

Una de cada cinco personas en lista de espera por encontrarse en situación de dependencia, falleció antes de recibir la ayuda, es decir, unas 100.000 personas.

La lista de espera ha venido disminuyendo, de 306.000 personas en diciembre de 2011 a 168.000 al final de 2014, y han descendido las personas catalogadas con el grado de dependencia III, de 438.682 personas en 2011 a 355.747 en 2014. Sin embargo hay 22.000 personas más en el grado I.

8. Ayudas estatales

En el último año se han dado 30.000 ayudas económicas menos por razón de los familiares que se encargan de cuidar a las personas en situación de dependencia. No obstante, han aumentado en 1903 los servicios de atención en centros de día, en 334 las residencias y 582 las ayudas por tener un asistente personal.

9. La situación de dependencia en España por Comunidades Autónomas

Los datos de la dependencia según la Comunidad Autónoma, en febrero de 2015, eran los siguientes:

Teniendo en cuenta el número de personas que tienen derecho a las ayudas de la Ley de Dependencia, o el gasto público por habitante al año, entre otros datos, las Comunidades que presentan un mayor nivel de situación de dependencia son Aragón, Canarias y la Comunidad Valenciana.

Las Comunidades mejor valoradas en este sentido son Castilla y León, que invierte 139 euros, el País Vasco, con 160 euros y Andalucía, con 121 euros.

La Comunidad Valenciana ha visto incrementada en un 0,3% la cantidad de personas atendidas, pero hay 8.339 personas valoradas menos, y 6.281 personas menos con derechos. Se han perdido 1.700 atenciones en plaza residencial en este Comunidad.

En Canarias se ha incrementado un 10,7% el número de atendidos, y un 6,3% el número de personas valoradas. No obstante, hay un nivel de desatención que ronda el 50% en el sistema.

Aragón tiene un grado de desatención superior al 20%.

Ceuta y Melilla se sitúan incluso por debajo de Aragón, debido a la falta de servicios.

Más Información: