La lectura rápida no es solamente una habilidad que te permite leer más rápido, sino que además te proporciona otras ventajas interesantes como por ejemplo aumentar la capacidad de comprensión o conseguir memorizar más cantidad de información y contenido invirtiendo menos tiempo.
Por eso, existen multitud de centros y empresas que imparten, bien online o presencialmente, numerosos cursos orientados a adquirir las destrezas necesarias para convertirnos en un buen lector de lectura rápida.
Además, existen en el mercado numerosos softwares y programas informáticos por internet que contienen ejercicios eficientes para lograr agilizar la lectura.
Lo importante a la hora de adquirir velocidad en la lectura es que se consiga a la vez entender lo que se está leyendo, pues de lo contrario, no tiene sentido hacerlo más deprisa.
«Leer» es sinónimo de «comprender»
Los cursos de lectura rápida permiten al lector adquirir habilidades físicas y mentales para leer deprisa y memorizar más contenido en menos tiempo.
Índice del artículo
1. Caracterísiticas del lector «ineficaz» y el buen lector
Un lector «ineficaz» podríamos decir que es aquel que realiza una lectura con las siguientes características:
- Lee siempre a la misma velocidad, independientemente de la dificultad del texto en determinados puntos.
- Subvocaliza, es decir, va diciendo las palabras conforme las va leyendo.
- No se concentra en la lectura, sino que mientras lo hace piensa en otras cosas.
- Los movimientos de los ojos no son eficaces y le dificulta la lectura.
A través de los cursos de lectura rápida, el lector consigue adquirir técnicas que le permiten aumentar la velodidad de lectura sin que se reduzca la comprensión del texto.[/caption]
El buen lector, sin embargo se caracteriza por ser capaz de leer un texto entre 3 y 5 veces más rápido que un lector medio. Y esto se debe a varios factores, de entre los cuales podríamos destacar los siguientes:
Movimiento ocular
El movimiento de sus ojos es bueno, manteniendo además un ritmo adecuado mientras avanza en la lectura.
Campo de visión
La zona de enfoque es amplia por lo que su campo visual abarca más palabras.
Subvocalización
Subvocaliza poco o nada, es decir, no repite las palabras que va leyendo en voz alta o lo hace mínimamente.
Concentración
Tiene una buena concentración y capacidad de retener lo que lee.
2. ¿Cuáles son las aptitudes que necesito para conseguir una buena lectura?
Por tanto, para lograr ser un lector «eficaz» y conseguir una buena lectura, rápida y óptima, deben adquirirse como mínimo las siguientes aptitudes:
Comprensión
Tener la capacidad de poder comprender lo que se está leyendo a alta velocidad y captar las ideas principales del texto junto con los detalles más significativos.
Adaptar la velocidad
En función de la dificultad que presenta el texto, se debe tener capacidad de adaptar la velocidad y el ritmo de lectura.
Lectura crítica
A la vez que se está leyendo, debe tenerse la habilidad de poder hacerlo de forma crítica, de tal forma que pueda a la vez valorarse el escrito y se puedan realizar los razonamientos necesarios.
3. ¿Qué se aprende en un curso de lectura abierta?
Realizar un curso de lectura rápida nos permitirá adquirir estas habilidades para conseguir así leer de forma eficaz y rápida, compendiendo además el texto que tenemos delante en menos tiempo.
Por ello, estos cursos tienen la finalidad de que, cuando lo hayamos realizado, habremos conseguido mejorar los tres aspectos fundamentales para una lectura rápida y eficaz:
- Mayor velocidad de lectura.
- Mejor comprensión de lo que leemos.
- Habrá aumentado nuestra capacidad de concentración.
Para conseguirlo se trabararán dos elementos:
Elementos físicos
La lectura es una actividad intelectual que va necesariamente unida a la visión, por lo que nuestros ojos y la percepción visual deben entrenarse para lograr mejorar nuestro campo de visión, al igual que la acomodación y la fijación. Los cursos de lectura abierta proponen diversos ejercicios para mejorar nuestra visión y con ello nuestra velocidad de lectura.
Elementos mentales
Los elementos mentales que intervienen en la lectura son básicamente la comprensión, la capacidad de retención y la memoria. Al igual que ocurre con el entrenamiento de los elementos físicos, conseguiremos aumentar estas habilidades a través de diversos ejercicios que tendrán la finalidad de ir adquiriendo las técnicas necesarias para conseguirlo.
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Cualquier persona puede perfeccionar su capacidad de lectura, pudiendo llegar incluso a multiplicar por tres la velocidad a la que lee manteniendo la misma comprensión del texto.[/caption]
4. Antes de realizar un curso de lectura rápida
Bien sea a través de un programa/sotfware o un curso online de lectura rápida, conviene antes de empezar que tengamos en cuenta los siguientes aspectos y consideraciones:
En primer lugar, deberemos comprobar que tipo de lectores somos para saber cuál será nuestro objetivo al realizar un curso de lectura rápida. Para que te hagas una idea, un lector rápido lee aproximadamente 350 palabras por minuto (ppp), mientras que un lector lento tan sólo lee 150 palabras al minuto.
De este modo, la finalidad del lector lento será conseguir ser un lector rápido, mientras que para este último, el curso debe proporcionarle las técnicas necesarias para multiplicar por tres su velocidad de lectura y conseguir llegar a las 900 – 1000 palabras por minuto.
Además, debemos saber detectar cuáles son los malos hábitos que poseemos a la hora de leer (subvocalizaciones, retrocesos oculares, distacciones, etc.) para poder eliminarlos con el curso que realicemos.
5. Lo qué conseguirás
Una vez hayas realizado un curso de lectura rápida, habrás trabajado las técnicas necesarias para lograr una lectura rápida manteniendo un buen nivel de concentración y memoria.
Los ejercicios te habrán servido para poner en práctica el entrenamiento que necesitas para aumentar la velocidad y mejorar tu capacidad de concentración.
Una vez que lo hayas conseguido, serás capaz de estudiar mucho más y mejor, podrás valorar más rápido y tomar decisiones en menos tiempo. En definitiva, te habrás convertido en un lector eficaz.